El Paseo por los ‘terroirs’ de los Grandes Pagos de España organizado por la Asociación Cultural de Sumilleres de La Rioja el miércoles 2 de junio en la sede del Club de Marketing ha incluido una espectacular cata de 14 vinos de otras tantas bodegas repartidas por toda la geografía española. Un auténtico festival de estilos, variedades y procedencias de un tipo de vinos considerados entre los de mayor prestigio del país. La lección magistral ha estado a cargo de Luis Valentín, cofundador de Valenciso y un gran experto con amplia experiencia, a quien ha acompañado en la presentación de los vinos el joven Adrián Martínez Bujanda, de Finca Valpiedra, última generación de esta familia bodeguera en incorporarse al negocio. Ambos representaban a la Asociación de Grandes Pagos de España, en la que Valenciso y Finca Valpiedra son las dos únicas bodegas de Rioja que están integradas.
En primer lugar se han catado cuatro vinos blancos: Fillaboa 2020 de la DO Rías Baixas, Valenciso 2019 de la DOCa Rioja, Clos d’Agon 2017 de la DO Empordà y Pago de Vallegarcía Viognier 2018 de la DO Pago de Vallegarcía. A continuación los tintos, con interesante debate y muchas preguntas de por medio, que se han catado siguiendo este orden: Cérvoles 2017 de la DO Costers del Segre; La Zarcita 2018 de Palacio Quemado en VT Tierra de Extremadura; Calzadilla Allegro 2013 de la DO Pago de Calzadilla; Tadeo 2017 de Cortijo Los Aguilares en la DO Sierrs de Málaga (Ronda); Petit Verdot 2018 de Marqués de Griñón en la DO Pago Dominio de Valdepusa; Chivite La Zorrera Garnacha 2015 en la IGP 3 Riberas; Petra de Valpiedra 2017 de Finca Valpiedra en la DOCa Rioja; Preludio de Sei Solo 2018 de bodegas Sei Solo en la DO Ribera del Duero; Aalto 2018 de Bodegas Aalto en la CO Ribera del Duero; y Numanthia 2016 de Bodegas Numanthia en la DO Toro.
Grandes Pagos de España es una asociación sin ánimo de lucro que reúne a 35 bodegas españolas con una máxima común: elaborar vinos en armonía con el suelo, la naturaleza y el clima de cada viñedo. Su misión es defender la personalidad única de los vinos de pago y dar a conocer su cultura y singularidad. El viñedo que cultivan suma 2.600 hectáreas, apenas el 0,2% del total del viñedo español, y el volumen de comercialización se sitúa en poco más de 4 millones de botellas anuales. Son vinos muy bien posicionados en el mercado exterior (50% de exportación) y en un rango medio de precios entre los 20 y 30 euros botella. Los requisitos para formar parte de la Asociación son muy exigentes e incluyen la procedencia del vino de un pago excepcional, la notoriedad alcanzada en el mercado y una inspección meticulosa por parte de un comité auditor. También es fundamental para la credibilidad y prestigio de las bodegas de esta asociación el hecho de someterse a un Comité de Externo de Control y disponer de una Red de Conocimiento integrado por profesionales que asesoran sobre el área técnica de viticultura.
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